Espionaje ilegal: el día que el espía Melo también fue espiado

El abogado y espía Facundo Melo incluyó en su relato ante la Comisión Bicameral que fiscaliza las actividades y organismos de inteligencia un capítulo relacionado con el espionaje en las cárceles: dijo que el ex jefe de Operaciones de la AFI (Agencia Federal de Inteligencia), Alan Ruiz, tenía una planilla “Excel” con los nombres de los ex funcionarios que estaban presos, “en otra columna la causa, donde tramitaba y el delito” y aparte los agentes del organismo que se debían ocupar del caso. “Tenía todos los presos K, por así decirlo… Recuerdo algunos nombres como Lázaro (Báez), creo que estaba Cristóbal López, estaba Carlos Kirchner”, relató. En la causa que tramita en Lomas de Zamora el juez Federico Villena hay toda una línea de investigación sobre cómo se espió a los presos y en algunos casos se los presionó para que se arrepintieran en causas que le interesaban al gobierno de Mauricio Macri.

Pero Melo contó que a él mismo le pasó que lo grabaran en su papel de abogado de Damián Lagaronne, uno de los barra bravas de Independiente que estuvieron detenidos en el penal de Melchor Romero en una casusa por asociación ilícita donde el fiscal Sebastián Scalera intentaba detener a Pablo Moyano y tendía una sombra sobre Hugo, su padre, ambos directivos del club. En ese penal hasta se había acondicionado una celda para Moyano hijo, pero el entonces juez de la causa, Luis Carzoglio, se negó a hacer lugar al pedido de detención. Su denuncia contra otros hombres de la AFI –Sebastián De Stéfano y Fernando Di Pasquale–, que lo fueron a ver con una orden de arresto redactada, le costó que le iniciaran un proceso de enjuiciamiento. “En el caso de (la cárcel) de Melchor Romero, lo viví. Alan Ruiz me hizo escuchar una conversación privada con mi cliente”, declaró ante los miembros de la comisión.

Como es esperable, Melo –que está imputado en la causa de Lomas de Zamora y corre riesgo de ir preso— ofreció un relato con aspectos donde intentó mostrarse como víctima. Pero en este caso lo que contó coincide con una denuncia que había hecho ya el año pasado en los tribunales de Comodoro Py y que había quedado a cargo de Ariel Lijo. Allí lo denunció a Ruiz. En un escrito ante ese juez dijo que lo habían echado de la AFI por no prestarse a la operación contra los Moyano. Le pedían, detalló en la comisión, que como abogado de Lagaronne “direccionara su declaración para involucrar a Pablo Moyano, no tanto a Hugo (…) se estaban entrometiendo con mi trabajo personal”. Finalmente dejó la defensa de barra de Independiente cuando éste aceptó declarar como arrepentido. Después de su denuncia penal ante Lijo, relató que la ex número dos de la AFI, Silvia Majdalani (o señora 8) le hizo llegar a través de sus compañeros Jorge Sáez y Leandro Araque –también imputados por Villena— la propuesta de que “no ratifique la denuncia” y a cambio lo “reingresaban en la agencia”, esta vez como agente “inorgánico”, algo que descartó. La causa, de todos modos, quedó a medio camino, con Majdalani, el ex titular de la AFI, Gustavo Arribas, De Stefano y Di Pasquale desvinculados.

Tanto en el penal de Ezeiza como en la cárcel de Melchor Romero (en ésta estaban todos los detenidos de la causa de Independiente), se encontraron en los allanamientos que comandó el juez Villena elementos de lo que se llama “cableado”, es decir, micrófonos, cámaras y cables de transmisión de datos, todo para espiar. En el caso de Ezeiza un testigo de identidad reservada contó detalles de cómo habían ideado esa instalación desde la cúpula del Servicio Penitenciario Federal (SPF) y se hacía un monitoreo desde la llamada Area 50, que es la de inteligencia, además de enviar a un funcionario, Fernando Carra, ex mano derecha del titular del servicio, Emiliano Blanco, a “ablandar” a los detenidos para que se arrepintieran en causas de Comodoro Py y comprometieran a la ex presidenta.

Melo se refirió a mucho de lo que contó en la Bicameral como operaciones que rechazaba. Sobre el Excel de la cárcel dijo: “Para mí era una locura, primero que se haga y, segundo, que si lo hicieron lo suban al grupo de whatsapp”, en alusión al grupo “Super Mario Bros”, integrado por 18 personas, donde lo habían agregado cuando lo mandaron a espiar a la hermana de Mauricio Macri, Florencia, y a su pareja, Salvatore Pica. También dijo que como circulaba tanta información allí estaba al tanto del espionaje a políticos, oficialistas y opositores, incluso a Cristina Fernández de Kirchner, María Eugenia Vidal, Emilio Monzó, Nicolás Massot, entre muchos otros. “Se volcaba mucha información, a mi criterio era un desparpajo”, comentó. También contó que le había advertido al actual vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli, que lo estaban espiando, y que había una grabación que le habían hecho a Ruiz donde quedaba claro. 

Fuente: https://www.pagina12.com.ar/272992-espionaje-ilegal-el-dia-que-el-espia-melo-tambien-fue-espiad

Talvez le guste...

Posts populares

Deja un comentario