Dos municipios bonaerenses retoman las clases presenciales y otros seis las suspenden

Ante la evolución de la pandemia en la provincia de Buenos Aires, el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, informó que los municipios Castelli y General Villegas dejarán de estar catalogados en Fase 2 y pasarán a estar clasificados en Fase 3, lo que implica el regreso parcial a la actividad presencial en las escuelas de los distritos. Mientras que otros seis distritos retrocederán a Fase 2 debido a la situación epidemiológica que presentan, con lo cual allí se suspenderá temporalmente la presencialidad educativa.

Los distritos bonaerenses que integran el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) continuarán en Fase 2 “hasta la finalización del decreto del Decreto 287/2021”, el 21 de mayo, y que “eventualmente”, si es necesario “hacer algún ajuste”, se analizará, pero que “la idea es mantener esa fase”, explicó Bianco.

Los detalles fueron precisados por el funcionario durante una conferencia de prensa que brindó en la Casa de Gobierno, en la Plata. Allí dijo que los municipios que retroceden a la Fase 2 son los de Carlos Tejedor, Junín, La Costa, San Miguel del Monte, Tandil y Trenque Lauquen. La decisión “implica la suspensión temporal de las clases” en esas localidades.

Vacunación de extranjeros

Buenos Aires habilitó la inscripción de personas extranjeras que residan en territorio bonaerense, para recibir la vacuna contra la covid-19. 

De acuerdo con la información difundida por la Jefatura de Gabinete, se podrán vacunar quienes tengan DNI argentino y estén tramitando la documentación que certifica su residencia en el país. Así, tanto migrantes como refugiados podrán acceder al “derecho de recibir la vacuna en las mismas condiciones y siguiendo los mismos criterios de prioridad establecidos para los y las bonaerenses”. 

Las personas que no posean DNI ni lo estén tramitando pueden inscribirse igualmente, y serán asistidos para que puedan realizar los trámites correspondientes. 

La gobernación bonaerense destacó que la decisión no sólo implica “el tratamiento equitativo en el acceso al derecho al cuidado de la salud”, sino que también favorece “la reducción de la circulación del virus, al incluir a más personas en el esquema de vacunación”.