Larreta abrió las sesiones en la Legislatura: insistió con el diálogo y omitió hablar de la coparticipación porteña

Lo dijo dos veces. Por si a alguien se le había pasado, Horacio Rodríguez Larreta repitió en dos oportunidades su llamado a dialogar con el gobierno de Alberto Fernández y el de Axel Kicillof. “Siempre voy a estar dispuesto a dialogar con el Gobierno nacional y con el de la provincia de Buenos Aires”, dijo el jefe de Gobierno, en un discurso en el que omitió hablar de la disputa por la coparticipación porteña y por la cesión de terrenos públicos que le había hecho Mauricio Macri y que ahora está en revisión. Además de plantear un panorama positivo en áreas controversiales (educación, salud, vivienda), el mandatario PRO hizo suyos algunos reclamos sobre el cambio climático y del feminismo. En un momento muy Jaime Durán Barba, se preguntó si escucha lo suficiente a los vecinos y aseguró: “No van más los líderes mesiánicos, ni las verdades absolutas”.

Se acercaban las 9 de la mañana cuando Larreta ingresó al recinto de la Legislatura porteña entre los aplausos de sus diputados y el silencio de la oposición porteña. Lo escuchaban desde el palco el titular de la Coalición Cívica-ARI, Maximiliano Ferraro, y el diputado nacional Alvaro González. Sentados junto a Larreta, estaban el vicejefe Diego Santilli y el vicepresidente primero de la Legislatura, Agustín Forchieri. En el hemiciclo, estaba sentado Alejandro Amor, defensor del Pueblo porteño. Larreta leyó todo su discurso, mayormente con un tono monocorde que hacía juego con un domingo temprano. “Soy un apasionado de cómo Buenos Aires vibra en cada región, de cómo de día estallan las plazas y de noche los teatros”, poetizó.

“La pluralidad de voces es un valor fundamental”, fue una de las ideas que más repitió en un discurso que se centró en temas municipales “para los próximos cuatro años”. El jefe de Gobierno fue saltando entre los principales tópicos, muchos de los cuales le suelen generar críticas.

Educación:

 “Estamos encarando una transformación educativa. Gracias al diálogo con los docentes, mañana empiezan las clases”, festejó Larreta, quien no escapó al tema de las vacantes: dijo que hay 9000 más. “Del plan de lanzar 54 escuelas, 40 ya están funcionando y se van a abrir ahora otras seis. Treinta tienen sala de 3. Nunca se habían construido tantas escuelas en un solo mandato”, repitió Larreta, pese a que una comprobación judicial -hecha por la jueza Elena Liberatori- desmintió esos números .

Larreta aseguró que va a haber robótica y programación desde sala de 5, aseguró que las madres y padres van a poder ver el boletín de sus hijos desde el celular, destacó que el programa Secundarias del Futuro -que fue resistido por los estudiantes por implicar trabajar gratis en quinto año- va a ampliarse de 44 a 66 escuelas y que para 2023 va a estar en todos los secundarios. También dijo que habría jornadas extendidas de inglés y programación en esas escuelas. El jefe de Gobierno no le huyó a los temas polémicos, como la creación de la UNICABA: “La creamos para que los docentes tengan rango universitario. Y también vamos a seguir trabajando con los Institutos de Formación Docente”, concedió.

Vivienda: 

“La transformación del Barrio 31 es un ejemplo de cómo le transformamos la vida a los vecinos. En las próximas semanas vamos a terminar las conexiones de luz y agua”, prometió Larreta, que leyó el mensaje de una “vecina” que se mostraba contenta con la mudanza del ministerio de Educación. “Con el Estado, llegó el transporte y una casa de comidas rápidas”, mencionó el jefe de Gobierno, que olvidó mencionar que el servicio de colectivos es limitado. También se refirió a la Villa 15, a Fraga y a la Rodrigo Bueno, “donde inauguramos un patio gastronómico”. Mencionó el Parque de la Innovación, planeado tras la venta del ex tiro federal, y también la Villa Olímpica, “donde más de 1000 familias van a estar mudadas”. No mencionó los reclamos de esas familias por los créditos UVA, que las obligaron a reclamar por el aumento de las cuotas.

Salud: 

“Todos los vecinos tienen un centro de salud a menos de 15 minutos de su casa”, aseguró Larreta. Prometió tres nuevos: en Boedo, Villa Luro y Lugano. Detrás de las vallas que rodearon la Legislatura, se había reunido un grupo de residentes y concurrentes a reclamar que se les reconozca su trabajo como profesionales de la salud.

Subte: 

Un momento que despertó algunas risas entre los opositores porteños fue cuando se refirió al subte, donde se avanza para que Metrovías complete cuatro décadas de concesión. “Vamos a seguir apostando al subte. Sumamos siete estaciones y más de 400 vagones. Cinco de las seis líneas tienen una frecuencia de tres minutos”, indicó. No hubo alusión a la construcción de la línea F, un proyecto que estaría descartando para su segundo mandato. Tampoco a si se harán nuevas estaciones.

Policía: 

Larreta fue pródigo en números. 20 mil policías. 9236 cámaras, a las que se sumarán otras 10 mil. “Bajaron todos los delitos en la Ciudad”, tituló. Mencionó especialmente a los “motochorros”: un 17 por ciento menos. Aseguró que iban a “mejorar la seguridad en el fútbol”. Lo escuchaba desde su banca su ex ministro de Seguridad Martín Ocampo, quien debió dejar su cargo por los incidentes en la cancha de River en la fallida final de la Copa Libertadores.

Parques y obras: 

“Nos comprometimos a sumar 110 plazas y parques”, sostuvo Larreta, quien dijo que en pocas semanas se cumplirá esa promesa. Prometió, además, dos grandes parques en Palermo y Caballito. También dijo que cuando muden la cárcel de Devoto “parte de los terrenos serán para un parque”. Hizo una alusión en su discurso al Cambio Climático y cómo la juventud entiende esos temas, en plan de no perder esa agenda.

Cuando se refirió a la obra pública, remarcó que se hizo en consonancia con Nación y la provincia de Buenos Aires y destacó que “3 millones de bonaerenses entran a la Ciudad”. Fue lo más cerca que estuvo de hablar de la coparticipación porteña, un tema que omitió adrede en su discurso. “Estoy completamente abierto al diálogo con ambos gobiernos”, repitió. También eligió no mencionar las transferencias de tierras a la Ciudad, aunque sí remarcó algunos usos que pensaban darle, por ejemplo, patios gatronómicos como el del Mercado de los Carruajes, por el cual fue beneficiada la familia de Nicolás Caputo, el “hermano de la vida” de Macri. Para obras como las del ferrocarril Sarmiento destacó que hace falta “coordinación con el Gobierno nacional”.

Feminismo: 

Larreta buscó ampliar su agenda hacia la “diversidad sexual” y mencionó la semana del “Orgullo BA”. Mencionó el 8M y dijo que “es una lucha que apoyo totalmente”. “La Ciudad debe avanzar hacia la igualdad entre hombres y mujeres. El talento no tienen género. Debemos terminar con el techo de cristal”, destacó y dijo que había 16 centros para denunciar situaciones de violencia de género. “Es claro que los hombres y las mujeres no vivimos el espacio público de la misma manera. La mayoría de las mujeres fue acosada”, sostuvo y remarcó que la respuesta vino por endurecer el código contravencional.

Larreta terminó hablandole a “los jóvenes”. En un párrafo que recordó a los discurso de Macri inspirados por Durán Barba, habló de terminar con “líderes mesiánicos” y dijo que se regirá por tres valores: humildad, pluralidad y cercanía. “¿Estaré escuchando lo suficiente?”, dijo que se preguntaba en cada reunión con vecinos. Si bien no hizo la más mínima alusión, está claro que la construcción de un perfil presidenciable para 2023 ya está en marcha.